El recién elegido líder estadounidense Donald Trump, cuya toma de posesión tendrá lugar el 20 de enero, no puede ceder ante el dictador ruso Vladimir Putin en el tema de la guerra en Ucrania.
Estados Unidos y la UE no deberían exigir concesiones serias de Kiev a favor de Moscú. Así lo informa 24 Channelcon referencia a The Telegraph.
¿Terminará Trump rápidamente la guerra?
Durante Durante su propia campaña de 2023, Donald Trump aseguró que “detendría el derramamiento de sangre de rusos y ucranianos” en las próximas 24 horas si ganaba las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Una retórica republicana similar se ha demostrado más de una vez.
El recién elegido líder estadounidense señaló que su plan depende de reuniones con Vladimir Putin y Vladimir Zelensky. También expresó su creencia de que si él, y no Joe Biden, hubiera sido presidente de Estados Unidos, Putin no habría decidido invadir en 2022.
Sin embargo, desde que ganó las elecciones el 5 de noviembre, Donald Trump aún no ha publicado detalles de su prometida iniciativa de paz. The Telegraph señala que Rusia ha declarado repetidamente que está dispuesta a negociar, pero en sus propios términos, en particular con la posibilidad de celebrarlas en Eslovaquia.
La publicación califica a Bratislava como demasiado dependiente del gas ruso, lo que la hace vulnerable y favorable a Moscú. Al mismo tiempo, esto convierte a Eslovaquia en un mediador indeseable para otras partes, a pesar de la oferta de Fico de llevar a cabo negociaciones allí.
A su vez, el líder ucraniano, como se ha señalado, cree que la devolución de los territorios ocupados sólo se puede hacer por vía diplomática, aunque esto requiere un esfuerzo importante. Los medios de comunicación señalan que desde hace 35 meses se libra una guerra a gran escala y, aunque Ucrania está sufriendo pérdidas, su resistencia es sorprendente por su resiliencia.
Varios expertos se muestran en general escépticos ante lo anterior. mencionó las declaraciones de Donald Trump sobre el inminente fin de la guerra, ya que la iniciativa requiere no sólo determinación, sino también concesiones reales por parte del Kremlin, lo que, dada la situación actual, parece poco probable.
Además , The Telegraph cree que si la iniciativa republicana se percibe como beneficiosa para Putin corre el riesgo de debilitar la unidad de la OTAN. Señalan que el dictador se ha aprovechado repetidamente de la debilidad de la comunidad internacional para promover sus acciones agresivas.
Sólo un loco querría que continuara la guerra en Ucrania. Pero sólo un tonto querría que esto terminara con Estados Unidos, y por defecto el resto de la OTAN, obligando al presidente Zelensky a arrodillarse ante Putin. La agresión de febrero de 2022 y los próximos tres años sigue siendo injusta, injustificada e imperdonable, dice el material.