El jueves 5 de octubre, las tropas rusas bombardearon la aldea de Groza (distrito de Kupyansky, región de Jarkov). Se sabe que han muerto casi 50 personas, incluido un niño de 6 años.

Según el jefe del departamento de policía de Jarkov, Oleg Sinegubov, los invasores abrieron fuego alrededor de las 13:15. En ese momento, había mucha gente pacífica en la cafetería y en la tienda.

Como resultado de otro crimen de guerra cometido por la Federación Rusa, murieron 49 personas. Sus cuerpos fueron recuperados entre los escombros. Entre los muertos hay un niño de 6 años.

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Seis personas más, incluido un niño, resultaron heridas.

Los médicos les brindan la asistencia necesaria. Continúan las labores de rescate en el lugar del ataque.