Un edulcorante popular será declarado posible cancerígeno: está presente en chicles y bebidas carbonatadas
Las principales empresas de bebidas y alimentos han estado utilizando este ingrediente durante décadas.
Uno de los edulcorantes artificiales más utilizados en el mundo será declarado sustancia con posible riesgo cancerígeno por la OMS en julio.Así lo informa Reuters, citando sus propias fuentes.
< p>La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), una división de la Organización Mundial de la Salud (OMS), realizó un estudio de seguridad sobre el aspartamo, un edulcorante utilizado en las gaseosas dietéticas Coca-Cola y los chicles Mars Extra, entre otros.
La agencia se prepara para clasificar el edulcorante como “posiblemente cancerígeno”. Esto sugiere que hay evidencia que relaciona el aspartamo con el cáncer, pero es limitada. IARC tiene otras dos categorías más serias en las que puede clasificar los alimentos: “probablemente cancerígenos” y “cancerígenos”.
Al mismo tiempo, IARC en su opinión no tiene en cuenta la cantidad de un producto que una persona puede consumir de manera segura. Este consejo para las personas proviene de un comité de expertos de la OMS sobre suplementos nutricionales, conocido como JECFA. Esta división anunciará su opinión el mismo día en que la IARC haga pública su decisión, el 14 de julio.
En el pasado, decisiones similares de la IARC con respecto a varias sustancias han causado preocupación entre los consumidores sobre su uso y han dado lugar a demandas que obligó a los fabricantes a cambiar las recetas y usar ingredientes alternativos.
El aspartamo se ha utilizado ampliamente desde la década de 1980 como edulcorante artificial en refrescos sin azúcar, goma de mascar, cereales para el desayuno e incluso antitusígenos. JECFA ha determinado que el consumo de aspartame es seguro dentro de ciertos límites diarios. Las grandes compañías de bebidas y alimentos lo han estado usando durante décadas.
Recuerde que los científicos anteriores llegaron a la conclusión de que los alimentos ultraprocesados se pueden equiparar con seguridad a las drogas y los cigarrillos. Dañan el cuerpo y causan adicción.