Se reanudaron las protestas en Georgia: los manifestantes vuelven al parlamento (video)
Miles de personas se reunieron para las protestas y volvieron al parlamento georgiano.
Por segundo día en Tbilisi, las protestas por el proyecto de ley ruso sobre “agentes extranjeros” no han disminuido. Después del almuerzo del 8 de marzo, la gente comenzó a converger activamente en nuevas manifestaciones.
Las publicaciones locales informan sobre esto y publican videos de protestas.
Las imágenes muestran cómo miles de georgianos se reunieron para protestar, sostienen pancartas con llamados a cancelar el proyecto de ley sobre “agentes extranjeros” aprobado en primera lectura y al gobierno prorruso a renunciar, también portan las banderas de su país, el Estados Unidos y la UE. Los manifestantes fueron nuevamente al edificio del parlamento con exclamaciones No Russian Law (“No hay ley rusa”).
Recordemos que el 7 de marzo, Georgia fue agitada por mítines contra la llamada “ley sobre agentes extranjeros”, que se llama prorrusa y está dirigida contra la integración europea del país. Durante la manifestación, los manifestantes se enfrentaron con la policía. Los agentes encargados de hacer cumplir la ley utilizaron cañones de agua, granadas de aturdimiento y gases lacrimógenos. Los manifestantes respondieron lanzando cócteles molotov. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Georgia informó que al menos 66 manifestantes fueron detenidos.
Lo que precedió a las protestas a gran escala en Georgia
El motivo de las protestas fue el proyecto de ley sobre “agentes extranjeros”, copiando una ley rusa similar. Sugiere que los medios de comunicación y las organizaciones públicas que reciban fondos del exterior recibirán el estatus de “agentes extranjeros”. De hecho, la iniciativa tiene como objetivo restringir las actividades de los activistas de derechos humanos y la prensa de oposición. Durante su consideración no hubo una pelea de diputados. El Primer Ministro de Georgia Irakli Garibashvili apoyó la ley sobre agentes extranjeros, mientras que el Presidente de Georgia se opuso.
La Unión Europea dijo que el documento contradice las condiciones de membresía de la UE. La Embajada de EE. UU. en Georgia calificó la adopción de este proyecto de ley como “un día negro para la democracia georgiana”.