Pasó 147 horas bajo los escombros: una niña de 10 años fue rescatada en Turquía tras un terremoto
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En Turquía, los rescatistas continúan sacando personas de entre los escombros. Algunos de ellos estuvieron bajo las ruinas durante más de 140 horas.
En la provincia de Hatay, en el sur de Turquía, una niña de 10 años fue rescatada de los escombros 147 horas después del devastador terremoto ocurrido el lunes 6 de febrero.
Continúan las labores de rescate y búsqueda
El vídeo muestra cómo los equipos de búsqueda y rescate sacan a la niña Kudi de entre los escombros y la transportan en una camilla.
Kudi es nuestro favorito. Amado Kudi, dice la persona del video.
Rescatistas lograron salvar a una niña de 10 años: mira el video
En la misma provincia fue rescatado Mustafa Sarygul, de 35 años. 149 horas después del terremoto, fue encontrado entre las ruinas de un edificio residencial de seis pisos.
Equipos de búsqueda y rescate, así como personal militar y miembros del equipo rumano de búsqueda y rescate, trabajaron durante cinco horas para salvar al hombre.
¡Atención!A partir de las 4:00 p. m. del 12 de febrero, el número de muertos por los terremotos en Turquía aumentó a 29.605, según CNN. Al menos 3576 personas han muerto en Siria: 2168 en áreas controladas por la oposición y 1408 en áreas controladas por Assad.
- Merve e Irem, dos hermanas que se encontraron bajo los escombros de su propia casa como resultado de un terremoto mortal, estuvieron allí dos días, pero les pareció una eternidad. Se salvaron gracias al increíble trabajo de los rescatistas. Lea la historia aquí.
- Los rescatistas también lograron salvar a un niño de 9 años que había estado bajo los escombros durante 5 días. Todo este tiempo, el niño esperaba la salvación en los brazos de su madre. El niño recibió hipotermia y deshidratación. Además, tenía heridas. El niño se encuentra actualmente en el hospital.
- Además, los medios de comunicación contaron la conmovedora historia del rescate de un niño de 13 años. Durante 55 horas, sostuvo a su periquito mascota en sus brazos. Cuando el niño rescatado vio a su tía, le entregó el pájaro. El loro ya está cuidado. Fue alimentado a pan y agua.