Cápsula radiactiva desaparecida encontrada en Australia: 'Como una aguja en el heno'
Diminuta cápsula radiactiva encontrada en Australia, perdida la semana pasada en tránsito.
Los servicios de emergencia australianos “encontraron literalmente una aguja en el heno”. Esto sucedió luego de que la cápsula radiactiva se perdiera mientras era transportada a lo largo de una ruta de 1.400 km.
Así lo informa la BBC.
La cápsula radiactiva, de 6 mm de diámetro y 8 mm de largo, pertenece al gigante minero Rio Tinto. Contiene una pequeña cantidad de cesio-137, que puede causar daños en la piel, quemaduras o enfermedad por radiación.
La cápsula es parte de un dispositivo de medición de densidad utilizado en la industria minera. Estaba en la mina Gudai-Darri de Rio Tinto en la remota región australiana de Kimberley.
El sensor estaba siendo transportado por un subcontratista que lo retiró de la mina el 12 de enero para transportarlo a una instalación de almacenamiento en los suburbios del noreste de Perth. . Cuando se desempacó para la prueba el 25 de enero, quedó claro que el sensor en sí estaba roto y la cápsula radiactiva se había perdido. También faltaba uno de los cuatro pernos y tornillos.
Las autoridades australianas han especulado que los pernos pueden haberse aflojado durante el transporte debido a la vibración en la carretera. Lo más probable es que la cápsula en sí se haya caído a través de grietas en el casco y el camión.
Después de la pérdida de la cápsula, la búsqueda comenzó de inmediato. Durante la operación, el servicio de emergencia utilizó equipos especiales, en particular, detectores de radiación. El área de búsqueda era enorme y las posibilidades de encontrarlo eran casi nulas.
Cabe señalar que el incidente ocurrió en un momento en que Rio Tinto intenta restaurar su reputación en Australia. En 2020, Rio Tinto hizo estallar antiguos refugios rocosos en el desfiladero de Juukan en Australia Occidental para expandir una mina de mineral de hierro. Esto generó fuertes protestas que llevaron a la renuncia de varios altos ejecutivos de la compañía.
Y el año pasado, una investigación parlamentaria descubrió que el acoso sexual era común en las operaciones mineras australianas. Antes de esto, una auditoría interna en Rio Tinto encontró que más de 20 mujeres habían sido violadas o intentadas violarlas durante un período de cinco años.